TORREMOLINOS Y LAS TORRES DE “PLAYAMAR”.
En la década de los 60 Torremolinos se convierte en el epicentro del turismo residencial en la Costa del Sol. La operación del Conjunto Residencial Turístico de “Playamar” fue proyectado por el Arquitecto Antonio Lamela (1968), siendo galardonado en 1969 con la Placa de Oro al Mérito Turístico como referencia internacional de la cultura arquitectónica de la época y actualmente convertido en un icono de la arquitectura turística y del paisaje urbano de Torremolinos.
El proyecto se compone de 21 torres de 15 plantas que en su ordenación buscan maximizar las vistas al mar y la ventilación cruzada de sus espacios habitacionales. Los cuerpos de las torres se elevan del suelo sobre un podio libre sostenido por pilotes escultóricos que permiten sus continuidades peatonales de los espacios ajardinados, reflejando su limpio racionalismo inspirado en los postulados de la “ciudad radiante” de Le Corbusier.
El proyecto del nuevo Plan General de Torremolinos intenta recuperar la identidad de estas importantes actuaciones residenciales, para reconocer en su modernidad las referencias de las nuevas propuestas capaces de mejorar y cualificar la urbanidad de la ciudad.